Claves para un intestino saludable

El sistema digestivo es la base en la que se apoya la salud física de los seres humanos. Un conducto por el que pasan todos los nutrientes. Un delicado equilibrio en el que intervienen diversos factores, y que debemos conservar; para lo cual se requerirá una buen salud intestinal para el aprovechamiento de todos los nutrientes.

¿Qué es un intestino saludable?

Un intestino saludable es aquel que:

• conserva en buen estado sus vellosidades (por donde absorbe los nutrientes)
• tiene una mucosa que actúa de filtro ante ciertos agentes nocivos y alimentos digeridos de forma incompleta
• posee una buena flora intestinal (la cual lo protege, elimina o pone freno a tóxicos, virus y patógenos, participa en la destrucción de algunas sustancias cancerígenas, sintetiza las vitaminas B, K y E, absorbe agua y minerales, y facilita el tránsito de los desechos para su eliminación)
  

La flora intestinal

La flora intestinal, situada mayoritariamente en el intestino grueso, puede alterarse a causa de cambios en la alimentación, de infecciones intestinales o por el uso prolongado de antibióticos, los cuales pueden debilitar las defensas intestinales y originar la entrada de gérmenes nocivos. Para proteger la flora intestinal se debe:

• Seguir una dieta equilibrada
• Mantener unas normas higiénicas al manipular los alimentos
• Tomar la fruta fuera de las comidas
• Empezar las comidas con una ensalada completa o con verdura
• Beber entre 1,5 L y 2 L de agua al día

Y además de evitar:

• Comidas ricas en grasas saturadas
• Azúcares refinados
• Exceso de carnes y embutidos
• Bebidas excitantes
• Antibióticos (si no es indispensable y siempre bajo prescripción médica)

Factores ambientales

El estado de ánimo y las preocupaciones, al igual que otros factores ambientales, influyen en el proceso de la digestión de los alimentos. Por estas razones se recomienda que:

• Las comidas sean tranquilas y relajadas
• Mantener horarios de comida fijos
• Masticar muy bien los alimentos

De todo esto, deducimos que alimentarse no es lo mismo que nutrirse, y que para nutrirse no es suficiente con comer sino que debemos colaborar con el organismo para que realice todas sus funciones. Con estas sencillas pautas, seremos capaces de alcanzar una buena salud intestinal.